Skip to content Skip to footer

Mi España 35 – La Ciudad de Albacete

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Ya desde lejos Albacete, viniendo desde Alcalá de Júcar por la CM-332 (también hay autovía pero es menos interesante), se presiente como un lugar dónde van a ocurrir cosas. Sí.

Hemos disfrutado de la provincia siguiendo un anillo que nos ha llevado por ella, a conocer pequeñas poblaciones pero que son una gran muestra de la España auténtica y yo creo firmemente que es porque los españoles que viven en esta zona son muy auténticos, en el sentido de poco influenciados por modas y tradiciones internacionales.

¿Quieres escuchar este post? ↓

Albacete es la ciudad más grande de Castilla-La Mancha aunque son menos de 180.000 personas y podrían caber todos en unos pocos bloques de Nueva York. Lo que hace singular esta ciudad, y todas las castellanas, es que no hay tantos edificios y entonces, está urbanizada a lo ancho más que a lo alto.

Albacete tiene una calidad-precio de sus hospedajes muy buena. Es por eso que me reservaría un hostal u hotel por el centro y así poder disfrutar de todo lo que nos ofrece esta ciudad.

Es verdad que esta tierra es conocida en el resto de España por su talento en la artesanía del acero de sus cuchillos y navajas. Una navaja de Albacete es lo que te piden de recuerdo en cuanto le dices a alguien que vas a visitar esta provincia. Pero Albacete es mucho más, mucho.

Quizás sea una buena idea empezar por lo más alto: ir al Depósito del Agua. Puedes subir a su cúpula y desde allí conocer desde arriba la ciudad y planear intuitivamente una ruta improvisada. Albacete es muy fácil de conocerlo andando. Da igual el orden pero los sitios que te recomiendo son sus plazas y sus alrededores. Pasa todo el tiempo que necesites por la Plaza Altozanos, por cierto, buena zona para hospedarse ya que está llena de edificios históricos, como también es digna de ser descubierta la Plaza Mayor (la grande ¿eh? porque hay dos).

Yo pasaría también por la catedral por dos motivos. Uno, porque representa perfectamente la cultura del albaceteño: humilde, sin pomposidad y cálida. Es un edificio humilde y por eso mismo, coherente con los que es: un edificio religioso y, lo segundo, tiene en su interior un óleo sobre lienzo de unos 1000 m2  de superficie ¡De los más grandes del mundo! Ahí puedes estar el tiempo que quieras contemplándolo que siempre encontrarás detalles. En realidad, todas las paredes están decoradas y tienen una esencia como la de las iglesias ortodoxas griegas. Es preciosa, de verdad.

Sí o sí tenemos que ir al Museo de la Cuchillería, que por fuera ya enamora porque está ubicado en lo que era un antiguo palacio de principios del siglo pasado. Aunque no seas aficionado a los cuchillos, dentro tienen piezas que seguro de que te impresionan y el acceso es muy barato. Si eres de museos entonces puedes visitar el Museo Arqueológico de la ciudad que además está al lado de unos jardines geniales (sobre todo si vienes en meses de calor) que es el Parque de Abelardo Sánchez.

Albacete es ciudad para más de un día y te lo aseguro porque esta ciudad tiene una noche maravillosa y lo es por su ambiente, por su gente. Si paseas por la calle peatonal del Pasaje de Lodares (que te hará pensar por unos minutos que estás en Milán-Italia) o por las calle Concepción y la calle Tejares, más conocido por “La Zona” verás un ambiente sensacional. Hay tapeo casi todo el día y el “terraceo”, como le llaman, es tan adictivo que yo fui con la intención de estar una noche y me quedé cuatro. De verdad. Así es Albacete, como sus gentes, sencillo pero encantador ¡Y si puedes elegir cuándo venir! ¡Ven en septiembre! Esta la Feria de Albacete que es una de las mejores de España. El ambiente es tremendo, festivo, hospitalario y vas a comer y beber B-B-B bueno, bonito y barato.

Marcho hacia Cuenca una provincia maravillosa que vamos a descubrir y darnos cuenta de que es mucho más que las casas colgadas. ¡Vamos!

[/vc_column_text][vc_empty_space height=”17″][/vc_column][/vc_row]

Go to Top
Ir al contenido